Yoduro de metilo

[3]​ También se produce en grandes cantidades estimándose cantidades superiores a las 214.000 toneladas anuales por las algas en los ecosistemas acuáticos y, en menor cantidad en la tierra, debido a hongos terrestres y bacterias .

Al igual que muchos compuestos halogenados, el yoduro de metilo normalmente se almacena en botellas oscuras para inhibir la degradación fotoquímica causada por la luz (que descompone el compuesto en yodo y metano), dando un tinte violáceo debido a la formación del citado halógeno.

Se puede purificar por un lavado con Na2S2O3 para eliminar el yodo formado seguido por destilación.

A escala industrial, se prefiere el sulfato de dimetilo (más tóxico), ya que es barato y tiene un punto de ebullición más alto.

Por ejemplo, se puede utilizar para proteger ciertos grupos funcionales, como ocurre con la metilación de los ácidos carboxílicos o fenoles:[7]​

El amoníaco y las aminas reaccionan con yodometano para formar yoduros de amonio.