Instituto Psicoanalítico de Berlín

Cualquiera podía acercarse al instituto en los horarios de atención para las primeras entrevistas.

Eitingon tomaba la decisión final sobre la aceptación de un paciente para iniciar el tratamiento y lo derivaba a un analista específico.

Schröter[4]​ explica que Berlín se había convertido en un centro del psicoanálisis practicado por médicos.

En 1923 se logró finalmente extender la labor del policlínico y «ampliarlo hasta transformarlo en aquel instituto que desde el comienzo nos imaginábamos".

Para los candidatos más necesitados, se financiaban los costos de los análisis didácticos como préstamo desde un fondo para becas.

A la comisión didáctica fundada en marzo de 1923 pertenecían Abraham, Eitingon, Karen Horney, Carl Müller-Braunschweig, Sachs und Ernst Simmel.

Junto al programa docente regular había desde 1924 un así llamado Kinderseminar, organizado por Otto Fenichel y Harald Schultz-Hencke.

[11]​ Se intentaba alcanzar a un público más amplio a través de seminarios y charlas fuera del instituto, por ejemplo para educadoras de párvulos, juristas y médicos generales.

Freud señaló que una de las tareas del instituto era la ampliación del conocimiento sobre las enfermedades neuróticas y el perfeccionamiento de la técnica terapéutica a través su la aplicación y puesta a prueba bajo nuevas condiciones.

Se hizo la experiencia, según Eitingon, de que los caminos alternativos que aparentemente acortaban el tratamiento, la mayoría de las veces solo ofrecían una garantía, a saber, errar en el objetivo principal.

Franz Alexander formó junto al abogado penalista Hugo Staub un «grupo de trabajo en criminalística».

En el instituto berlinés, junto a los psicoanalistas ya antes nombrados, trabajaron también Theodor Reik y Melanie Klein.

Ernst Simmel fundó en 1927 el Sanatorium Schloss Tegel, la primera clínica psicoanalítica del mundo.

El Instituto Psicoanalítico de Berlín se transformó en los años '20 en un centro del psicoanálisis con trascendencia internacional.

Si acaso la formalización de la formación en psicoanálisis en el aspecto clínico ha traído o no ventajas es un tema controvertido.

El directorio de la Asociación Psicoanalítica Alemana (Deutsche Psychoanalytische Gesellschaft, DPG) quedó integrada ahora por Felix Boehm y Carl Müller-Braunschweig.

Edith Jacobson se comprometió en el trabajo de la Resistencia, fue detenido en 1935 y pudo huir en 1938.

[23]​ Finalmente Müller-Braunschweig fundó en junio de 1950, junto a unos pocos colaboradores la Deutsche Psychoanalytische Vereinigung (DPV).

La DPG y la DPV existen hasta hoy como asociaciones independiantes, que sin embargo cooperan entretanto.

Placa conmemorativa en la calle Postdamer Straße del barrio berlinés Tiergarten , donde se encontraba el Instituto Psicoanalítico de Berlín.