La inmigración brasileña al territorio del actual Uruguay inició durante la época colonial.
Debido a su proximidad geográfica, tras el establecimiento de Uruguay como un Estado independiente, ambos países continuaron manteniendo un fuerte intercambio económico y político.
[3] Entre los migrantes brasileños del siglo XIX, destacan los padres de Aparicio Saravia, militar y caudillo del Partido Nacional;[4] e Irineu Evangelista de Sousa, banquero y financista.
[5] A lo largo de la frontera entre Uruguay y Brasil existen localicadades fronterizas como Chuy-Chuí, Rivera-Santana do Livramento y Artigas-Quaraí, en las cuales no existen grandes barreras físicas lo cual conlleva a la existencia de un fuerte intercambio cultural, económico, educativo y social entre las poblaciones de ambos ambos márgenes del límite internacional, dando lugar a "ciudades binacionales".
[2] Entre los escolares nacidos en el exterior, los brasileños son uno de los grupos más numerosos, entre las 62 nacionalidades que están representados en la educación primaria uruguayas.