El impacto ambiental de la agricultura es el efecto que las diferentes prácticas agrícolas tienen sobre el medio ambiente.
[2] La agricultura industrial es la principal contribuyente de metano y óxido nitroso a la atmósfera terrestre.
La agricultura conlleva un gran consumo de agua (aproximadamente 2/3[8] del total) y tierra, lo cual desplaza a otras especies en el proceso.
[9] Se pueden distinguir dos indicadores del impacto ambiental: el basado en los medios analiza los métodos de producción empleados en la práctica agrícola, mientras que el basado en los efectos analiza el impacto de los métodos sobre el sistema agrícola y el medio ambiente.
[10] Un indicador que refleje la pérdida de nitrato en las aguas subterráneas estaría basado en los efectos.
[13] El cambio climático y la agricultura intensiva son procesos interrelacionados, que tienen lugar a escala mundial.
[25][26] Debido a estos impactos negativos, pero también por razones de eficiencia agrícola (ver Alimentos vs.
El ajuste a este cambio geográfico implicará costos económicos e impactos sociales considerables.
La deforestación afecta el albedo de la tierra, produciendo cambios en las temperaturas globales, los vientos y las precipitaciones.
[50] Brasil, Indonesia, Myanmar, Nigeria y Tanzania son los cinco países que tuvieron el porcentaje más elevado de deforestación en el período 2010-2015.
Los pesticidas son preparaciones químicas que se usan para matar las plagas de hongos o animales.
La agricultura intensiva, la deforestación, las carreteras, el cambio climático antropogénico y la expansión urbana se encuentran entre las actividades humanas más importantes en cuanto a su efecto sobre la estimulación de la erosión.
Sin embargo, existen muchas prácticas que pueden prevenir, reducir o limitar la erosión de los suelos vulnerables.
No se requiere lluvia en este sistema, y las granjas que usan plasticultura están construidas para fomentar una escorrentía más rápida.
La plasticultura permite que los pesticidas sean transportados más fácilmente en la escorrentía superficial hacia humedales o arroyos de marea.
La mayoría del plástico termina en la basura, aunque existen otras opciones de eliminación, como colocar mantillos en el suelo, enterrarlos o almacenarlos en el sitio, reutilizarlos, reciclarlos y/o incinerarlos.
El suelo puede ser irrigado en exceso debido a la mala uniformidad de distribución.
[76] Además, los residuos de alimentos que no se manipulan o recuperan adecuadamente mediante técnicas como el compostaje, pueden tener muchas consecuencias ambientales negativas.
En Argentina, las comunidades indígenas wichís del Chaco se han visto particularmente afectadas por la deforestación de la selva chaqueña.
[82] Los efectos de los plaguicidas en la salud humana pueden ser agudos o retrasados en aquellos que están expuestos.
[83] La aplicación de plaguicidas y fertilizantes impacta sobre la salud humana, existiendo relaciones directas entre varios tipos de cáncer,[84] problemas en la piel, problemas neurológicos,[85] trastornos en el desarrollo neurológico,[86] defectos congénitos y muerte fetal.
[95] Los caminos de acceso también facilitan la destrucción del hábitat y su conversión para formar potreros.
[103][104] Se han realizado importantes esfuerzos por convertir en sostenible el cultivo de la palma por varias organizaciones, tales como la "Roundtable on Sustainable Palm Oil",[105] un grupo industrial, y el gobierno malayo, que se ha comprometido a mantener el 50 % de su superficie como bosque.
En estos casos, el punto principal consiste en que es rentable reciclar la mayoría de los afluentes.
Cualquier residuo vegetal, como bagazo, cáscara del cacao, etc., que no se utilice en la producción de vapor para el proceso, debe ser empleado, tanto como sea posible, como alimento de ganado, materia prima para producir cartón o lámina de fibra, o debe ser procesado para obtener gas combustible y fertilizantes, etc., en vez de ser arrojado en el riachuelo más cercano, como a menudo se hacía en años anteriores.
El humo producido al quemar los cañaverales antes de la cosecha tiene un efecto, pero si se lo maneja correctamente, será un fastidio antes que un problema ecológico.
Usualmente, para proteger al medio ambiente, es suficiente observar las guías en cuanto a las tasas y técnicas de aplicación, siempre que la sustancia utilizada no sea inapropiada por razones toxicológicas o biológicas.
Sin excepciones a este principio los proyectos que impliquen la conversión de las áreas naturales de importancia ambiental – las tierras no cultivadas, manglares, saladares, bosques tropicales, etc. y los proyectos que no evitan los impactos indirectos, tales como el desarrollo inducido y la caza o tala incontrolada en las tierras silvestres recién accesibles.
En estos casos, la buena práctica agrícola en sí, no puede prevenir el impacto sobre el medio ambiente y su atenuación.
Toma en cuenta la capacidad productiva de la tierra, como factor fundamental para cualquier decisión, en cuanto a la inversión agrícola.