Alberga los restos mortales del dramaturgo Lope de Vega, aunque hoy se desconoce su situación exacta.
Al finalizar la contienda fue restaurada por Francisco Íñiguez Almech entre 1943 y 1959, cambiando este arquitecto la orientación del edificio y dejando la antigua torre, que fue una de las más altas de Madrid, tristemente inacabada.
También conocida como capilla de los Arquitectos, ya que fue adoptada por éstos para su devoción y sepultura.
En ella están sepultados arquitectos notables como el mismo Ventura Rodríguez o Juan de Villanueva.
Debido a su situación, son numerosísimas las personas con una relevancia histórica, desde presidentes del gobierno como Práxedes Mateo Sagasta a bandoleros como Luis Candelas que figuran en sus archivos parroquiales por nacimientos, bautismos, bodas o defunciones.
Tras su desaparición debida a la remodelación de la zona, fue sustituido por una floristería «que no ha cerrado ni por el bombardeo».