Iglesia de Salinas de Yocalla

La iglesia fue construida en 1747 para dar servicio a los habitantes y las familias relacionadas con la extracción de sal colorada y cal hidráulica para la minería en el sector estuvo abandona por mucho tiempo a partir del cese de la actividad de extracción en el municipio.Por las dimensiones y la suntuosidad del templo se supone que la actividad y las personalidades del lugar pudieron tener una relevancia cuyo registro aún no abastece la necesidad de información al respecto[5]​[6]​Plataformas los rodean desde su base hasta sus cimas, formando terrazas en las que, o entre las que, los indios de antaño cultivaban sus cultivos; pero donde estos signos son de antigua población e industria, ahora todo está desolado y no existe ninguna habitación humana en su vecindario.Al respecto una de las múltiples citas y traducciones del libro metalúrgico Arte de los metales, se cita a Alvaro Alonso Barba,español del s XVII quien menciona las salinas como un lugar estupendo por su cercanía a la ciudad de Potosí y el Cerro Rico.Las obras fueron cuestionadas en 2020 por diferentes decisiones técnicas que se señalaron como inapropiadas para un trabajo de restauración [11]​ [12]​ La fachada del templo presenta una amplia decoración en la que se destacan numerosas figuras como sirenas con charangos, se ha postulado la idea de que fueran las sirenas Quesintuu y Umantuu y que su presencia es una evocación del paraíso[13]​ [14]​ La portada presenta muchas similitudes con la portada de la Iglesia de San Lorenzo de Carangas.
Imagen de la Iglesia tras la restauración.
Portada de piedra tallada.