Cabe señalar que tanto shuar como jívaro proceden del proto-jivaroano *šiwar(a) 'ser humano'.
El propósito principal de la educación bilingüe e intercultural fue enseñar español a los shuar para que pudiesen demandar igual trato como ciudadanos ecuatorianos y permitir a su idioma ser una lengua moderna y vibrante.
El inventario fonológico establecido por Turner (1958) es relativamente simple: El inventario vocálico también es relativamente simple: Algunas fuentes añaden una vocal [e] pero esta es un alófono de /a/ en un entorno palatal, otras fuentes usan la grafía
La morfología nominal es relativamente simple ya que básicamente consiste en raíces desnundas con algún elemento deíctico clitizado, pero no aparecen distinciones de género o número en el nombre o los adjetivos (cuando una forma léxica es objeto verbal se marca con el afijo -n).
Una formal verbal personal en shuar suele consistir en una larga cadena de sufijos de la siguiente forma: El siguiente cuadro muestra la conjugación del verbo 'ser, estar' en el presente: Respecto al orden básico el shuar es una lengua muy consistentemente SOV: Desde la última colonización realizada por los migrantes mestizos y blancos a la Amazonía Ecuatoriana, la lengua shuar ha servido como base para los muchísimos topónimos y nombres de plantas que ahora existen en las provincias de Pastaza, Morona Santiago y Zamora Chinchipe.