[2] Hunzahua cayó enamorado de su hermana Noncetá, descrita como muy bella y amada por su pueblo.
La madre de los hermanos, la cacique Farativa, estalló en cólera e intentó castigar a Noncetá golpeándola con la sana (palo usado para hacer chicha) reclamándole que no se podía casar.
A lo cual la madre lanzó la sana y rompió la vasija, derramando la chicha en enormes cantidades, formando el Pozo de Hunzahúa.
Al llegar a su bohío cayo en la realidad del pecado que cometió, además de estuvo rodeado por muiscas protestando contra los amantes.
Gracias a una encrucijada tomaron un largo camino por Bacatá hasta el Salto de Tequendama, donde los hermanos decidieron vivir aislados en los bosques aledaños.