En 1852 se convirtió en capitán y en 1856 ascendió a mayor.
Obernitz recibió una subvención de 100.000 taleros por estos servicios.
Después de su retiro en 1888, él y su esposa Anna Friederike Ida Bertha, née von Usedom, compraron una villa en Bad Honnef.
Más tarde, su esposa fue enterrada junto a él.
En el cementerio todavía se puede ver la lápida de Hugo von Obernitz, a quien le robaron el águila prusiana de bronce en 1988.