El duque y la duquesa de Bedford le regalaron el libro a su sobrino Enrique VI en 1430.
El manuscrito se elaboró en varias etapas, incluyendo material nuevo que se fue añadiendo a medida que el manuscrito pasaba de propietario a propietario.
[2] No se conoce con certeza el origen del manuscrito, ni hay acuerdo sobre su mecenas inicial.
[8]Este regalo fue conmemorado en el propio manuscrito, en el f. 256r, en una inscripción realizada a petición del duque, escrita por John Somerset, tutor y médico personal de Enrique.
Luego, con la venta de la biblioteca del Duque, Sir John Tobin lo compró: y en 1838 se lo regaló a su hijo, el reverendo John Tobin, quien lo vendió en 1851 al librero William Boone.
Los artistas responsables del manuscrito no han sido identificados con certeza, pero se les conoce colectivamente como el "Taller de Bedford", y al artista principal se le conoce igualmente como el "Maestro de Bedford".