[5] Según Amiano Marcelino, esto ocurrió el seis de noviembre del año en que fueron cónsules Arbecio y Loliano.
Luego, a los pocos días, Helena, la doncella hermana de Constancio, fue unida en matrimonio con el César".
Pues una vez antes, en la Galia, ella había tenido un hijo, lo perdió por maquinaciones: una comadrona había sido sobornada con una suma de dinero, y tan pronto como nació el niño, cortó el cordón umbilical más de lo debido, y así lo mató; tantos esfuerzos y pensamientos se emplearon para que este el más valiente de los hombres, no tuviera herederos.
Tougher examina la relación entre Juliano y Eusebia, comentando si Helena estuvo o no afectada por él.
Según Tougher, los historiadores posteriores han tendido a aceptar esta representación sin cuestionársela.
Constancio seguía los ejemplos de Diocleciano y Constantino I quienes también visitaron Roma durante sus propios Vicennalia.
Mientras tanto, Constancio se vio involucrado en un conflicto contra Sapor II del Imperio sasánida, otra fase de las guerras romano-persas.
Se aprovechó de la paz lograda por Juliano, ordenándole que transfiriera muchos oficiales y unidades desde la Galia hasta la frontera con Persia.
La fecha exacta de sus proclamaciones se desconoce, estimándose en febrero o marzo del año 360.
En aquella época Juliano y sus fuerzas marchaban hacia el este para enfrentarse a Constancio.
Juliano se dedicó a escribir una serie de cartas públicas que explicaban y justificaban sus acciones.
Aquellas cartas se dirigían a varias ciudades del imperio que Juliano intentaba atraerse, incluyendo (al menos) Atenas, Corinto, Roma y Esparta.
Por todo el palacio había un clamor creciente y un tumulto general, le pedí a Dios que me diera una señal.
Pues aunque la confianza en Dios que el anterior signo no podía sino inspirarme fortaleza, me sentía apenado y avergonzado porque parecía que no podía obedecer a Constancio fácilmente hasta el final".
Las mentes de las tropas así se inflamaron, y todos corrieron armados a palacio.
Por contraste, no hay tales alabanzas a Helena, ni ninguna afirmación real sobre ella.
[27] Gibbon señala que los "repetidos embarazos [de Helena] no habían dado fruto y el último resultó fatal".
Sin embargo, como Sozómeno, el escritor de este artículo la confunde con su hermana y la llama "Constantia Augusta".