Los Hechos de Pablo es uno de los principales y más antiguos textos apócrifos cristianos, conocidos también como Evangelios apócrifos y datan del siglo II.
Además de las cuatro principales secciones mencionadas, el resto de los Hechos subsisten sólo en fragmentos del siglo III al siglo V: Los textos forman un conjunto coherente, y generalmente se cree que fueron escritos por un único autor sobre la base de tradiciones orales, más que basándose en cualquier otro texto apócrifo o del canon ortodoxo.
El principal énfasis del texto está puesto en la castidad y en el antignosticismo.
Sin embargo, también contenían elementos doctrinales ortodoxos respecto a la castidad y a la resurrección, además de mencionar la estrecha relación entre la pureza sexual y la salvación.
En la apócrifa Tercera epístola a los corintios se afirma que fue escrita en prisión para corregir las interpretaciones erróneas que habían generado la primera y la segunda.