La lucha continuó hasta que ambos ejércitos quedaron exhaustos, con un elevado número de bajas.La Unión de Kalmar, gobernada por Dinamarca, fue una realidad política entre 1397 y 1523, cuando finalmente se derrumbó debido al malestar sueco ante la hegemonía danesa.Los daneses controlaban además la Región báltica, complicando aún más las cosas a los suecos.Gustav Vasa tomó una decisión que, aunque no iba a dar frutos inmediatos, iba a tener un considerable impacto en la fortuna posterior de Suecia: decidió reformar la estructura militar.Los hombres permanecían en sus hogares durante el tiempo de paz, lo que se financiaba con cargo a impuestos, pero eran convocados periódicamente para reunirse y entrenarse.Emisarios del Emperador alemán fueron enviados para mediar y tratar de lograr una paz, pero los suecos no se presentaron a la cita convocada en Rostock.La armada sueca estaba dirigida por Jakob Bagge, y la de Dinamarca-Lübeck por Herluf Trolle.Bagge fue capturado y el mayor buque de guerra del Báltico, el Mars (también conocido como Makalös) hundido.La flota sueca se tuvo que retirar a Estocolmo, sin conseguir romper el bloqueo naval.En esta ocasión, los suecos capturaron cerca de Bornholm el buque insignia danés, el Jegermeshter, lo que consolidó su hegemonía en las costas orientales del Báltico.Suecia ocupó la indefensa provincia noruega de Jemtland, aunque fue recuperada poco tiempo después.Inicialmente fueron bien recibidos por los habitantes de la zona, pero los abusos cometidos y los elevados tributos impuestos acabaron creando resistencia a los suecos.Aunque el contingente sueco, formado por 400 hombres, fue rechazado cuando intentó tomar Bergenhus, consiguió mantener sus posiciones en Jämtland y Härjedalen.En el sureste, logró apoderarse del Castillo de Båhus, aunque lo perdería nuevamente en 1566.Parte del ejército cruzó el valle de Østerdalen, conquistando Hamar en 1567 y prosiguiendo su marcha hacia Oslo.Sin embargo, cuando alcanzaron Oslo, sus habitantes ya habían incendiado la ciudad antes de que los suecos pudieran ocuparla.Los mercenarios daneses eran superiores al ejército nacional sueco en todos los aspectos excepto en uno: los profesionales solo luchaban cuando se les pagaba.Durante noviembre devastó el territorio, incendiando las viviendas, quemando cosechas y matando al ganado.