Guerra italiana de 1536-1538

Como respuesta, el rey Carlos I de España invadió Provenza en junio de 1536,[1]​ llevando a cabo un rápido avance saqueando Antibes, Grasse, Castellane y ocupando Aix-en-Provence.

Sin embargo, prefirió retirarse a Milán antes que atacar Aviñón, territorio fuertemente fortificado.

Hay fuentes que hablan de que la retirada se produjo porque algunas tropas francesas dejaron a propósito fruta demasiado madura en los árboles, en un intento de causar disentería a las tropas con las que se enfrentaban.

La tregua de Niza dio por concluido el conflicto, dejando Turín en manos francesas, lo cual no producía un cambio significante en las fronteras de Italia.

Un hecho significativo es que durante la firma del tratado los monarcas Francisco I de Francia y Carlos I de España rechazaron estar sentados en la misma habitación, muestra del odio mutuo que se tenían.