El continente africano está fragmentado políticamente en 54 estados, con bajos niveles de desarrollo pero con importantes recursos naturales en sus territorios.
La principal arma del colonizador es ser oportunista, En África predominaban los Estados de origen tribal, pequeños territorios gobernados por monarquías familiares históricas.
La mayoría de estos Estados desaparecieron conforme avanzaba el siglo XIX y llegaban masivamente los colonos europeos.
Aunque en torno al año 1800 la presencia continental de europeos se limitaba a la Colonia del Cabo ingleses, franceses y a las costas angoleñas y de Mozambique portugueses, lo cierto es que las potencias europeas sí tenían varios enclaves portuarios por toda la costa africana.
Los europeos explotaron una forma de comercio (el marítimo) que los reinos africanos no habían desarrollado.
Los portugueses fueron pioneros instalándose en las costas orientales Aparecieron imperios comerciales, que basaban toda su economía en la exportación de materias primas (madera, goma, oro, cera, marfil, pieles…), pero que, pese a su poder, no pudieron hacer nada contra la invasión europea.
Esta conferencia reunió a 14 países europeos: Alemania, Austria- Hungría, Bélgica, Dinamarca, España, Francia, Gran Bretaña, Italia, Países Bajos, Portugal, Rusia, Suecia-Noruega (cuya unión real subsistió de 1814 hasta 1905), Turquía y Estados Unidos.
Sus sectores económicos son la agricultura y los servicios pero estos no representan un crecimiento positivo.
Si poseía las suficientes propiedades un hutu podía ascender de clase y llegar a ser tutsi.
Se organizaron nuevas elecciones municipales con la esperanza de difundir el desequilibrio del poder tutsi.
Los soldados del ejército aumentaron de 5000 a 35 000, y la Guardia Presidencial estaba equipado armamento moderno.
La ONU ordenó la retirada de los cascos azules, dejando a la población civil sin protección.
Durante toda la segunda mitad del siglo XIX, Gran Bretaña invirtió en sus misiones colonizadoras, lideradas por Cecil Rhodes, y para el año 1900 los cuatro estados sudafricanos pertenecían a la fuerza al Reino Unido.
Al concluir la Primera Guerra Mundial después de 1918, Sudáfrica era un estado consolidado e influyente, que reivindicó los territorios perdidos por Alemania en África.
Con el apartheid se definen categorías raciales, como gente de color, blancos e indígenas.
Un personaje importante sería el rebelde Nelson Mandela, quien promovía una campaña de desobediencia civil sin violencia, acto que lo llevó a la cárcel, fue tal su liderazgo que el gobierno lo sentencio a un estado de inhabilitación política y social.
En la década de los 80, Sudáfrica logró superar su aislamiento económico, mediante el comercio con Brasil, Chile e Israel.
Pero esto no era suficiente como para sustituir las ganancias que se podía obtener con el mercado norteamericano y europeo.
En lo que concierne a Estados Unidos e Inglaterra, no les importaba tolerar el apartheid siempre y cuando Sudáfrica siguiera luchando contra el comunismo, pero con el paso de los años era difícil mantener esa posición.
En los años 60 fue descubierto el petróleo en Nigeria, y esto aceleró la industrialización del país, pero este desarrollo beneficia en la mayoría de los casos a las empresas extranjeras generando una grave desigualdad social.
De esta paridad en las creencias religiosas surge un grupo que pretende radicalizar el país hacia el Islamismo, y teniendo como objetivo la implantación de la Sharia en Nigeria, es decir la ley islámica vigente en muchos estados en África y Medio Oriente.
Días después, el líder Shekau reivindicó ambos ataques e insistió en que la educación de forma occidental debe eliminarse.
En el 2014, la organización se autoproclamó adherida al Estado Islámico conformado por ISIS, y denominan sus territorios como Provincia de África Occidental.
A finales del 2014, Camerún anuncia una coalición internacional contra el terrorismo, junto con sus vecinos de Benín, Chad, Níger y Nigeria.
Actualmente el conflicto sigue en actividad y en el mes de octubre del presente año 2016 se liberó a 21 niñas del secuestro en Chibok, esta liberación gracias a negociaciones de la Cruz Roja con el grupo terrorista.
200.000 millones de dólares es el enorme monto que totalizó el comercio entre África y China en el año 2013, más del doble de los nada despreciables 85.000 millones que Estados Unidos intercambió con el continente africano ese mismo año.
Y finalmente, Reino Unido tiene un estilo mucho menos discreto, como veremos más adelante.
Hoy en día más de 2500 empresas chinas hacen negocios en África, especialmente en sectores como las finanzas, las telecomunicaciones, la energía, las manufacturas y la agricultura.
Hoy son más precavidos y cuando actúan lo hacen bajo el mandato de algún organismo internacional.
El país que vio nacer el liberalismo económico pone en práctica su marco teórico a la perfección: la empresa privada tiene vía libre para actuar.