Frente Argentino de Liberación
Obtuvieron así dinero suficiente para comprar entre 11 y 13 terrenos en el Gran Buenos Aires.En mayo de 1969 la Policía siguió la pista de unos neumáticos que habían sido adquiridos para el camión que transportó lo robado e identifica al comprador, Alejandro Baldú, y a los agentes de propaganda médica Alberto Arruda (27), Sergio Pablo Bjelis (27) y Carlos Malter Terrada (24), el abogado Hernán Henríquez y al empleado bancario Juan Carlos Cibelli, si bien solamente logra detener a este último, que permanecerá en prisión hasta 1973.No detectan el nombre de la organización ni ésta sale a la luz.La organización estaba preparando un asalto a un tren pagador haciéndose pasar por personal de la Fuerza Aérea para lo cual Baldú junto a otro militante, Carlos Della Nave, debían pintar con los colores usados por esa arma dos vehículos.Primero lo intentaron con el embajador de Alemania Federal en la Argentina, pero mientras lo vigilaban advirtieron que los custodios sospechaban.En realidad, la suerte de Waldemar Sánchez no inquietaba demasiado a los presidentes y fue así que Stroessner partió para la residencia El Messidor, en Villa La Angostura, en su previsto plan vacacional sin mencionar el tema en público.A la noche el gobierno comunicó su rechazo a las exigencias, afirmando que Baldú estaba prófugo de la justicia y Della Nave se encontraba “procesado por delitos comunes ante el Juzgado Federal de San Martín”.La revista Análisis en una nota sin firma hizo este balance: “El FAL consiguió algunos puntos victoriosos: una espectacular movilización policial había resultado infructuosa [para detenerlos o rescatar al cónsul], la organización guerrillera había ganado notoriedad internacional, y la aureola de humanitarismo les pertenecía” y el gobierno había “mantenido la imagen de autoridad al no aceptar el chantaje político”.UU., mediante seis proyectiles sincronizados eléctricamente y apuntados a lugares no habitados del edificio.