Francisco Pacheco y Núñez de Prado

Fue heredero por partida doble de sus tíos paterno y materno, que murieron sin hijos.

En agradecimiento, el Ayuntamiento de Sevilla dedicó las calles adyacentes al colegio a ilustres caballeros maestrantes que habían hecho realidad el proyecto.

Aunque su tío el marqués de Gandul fuera un destacado carlista, Pacheco y Núñez de Prado militó en las filas del Partido Liberal-Conservador, llegando a ser vocal del comité provincial de su partido.

No llegó a ocupar la alcaldía, aunque fue concejal durante varios años.

Según el testimonio del arqueólogo anglo-francés Jorge Bonsor, Francisco Pacheco poseía en los jardines del palacio de Gandul numerosos restos procedentes de la rica zona arqueológica de Los Alcores en la que se situaba su finca.

Solo halló rellenos y materiales constructivos de época prerromana por lo que abandonó el proyecto.

Bonsor negoció con Francisco Pacheco la realización de excavaciones arqueológicas en sus terrenos de Gandul, pero no se llevaron a cabo porque el marqués exigía el cincuenta por ciento de las piezas extraídas, cosa que no aceptó Bonsor, así que solo pudo excavar en propiedades adyacentes a Gandul, como Bencarrón, Cañada Honda y Las Canteras.

Francisco Pacheco y María Dolores Rubio tuvieron ocho hijos.