Aristocracia

En tiempos pasados la Antigua Roma tuvo a los patricios como clase aristocrática y en otros países, como Japón, los nobles del pasado fueron primero los daimyō de alto rango y más tarde los kazoku, en la India eran los chatrías, los andriana en Madagascar, los amira en el imperio otomano, etc.

Muchos pensadores del mundo antiguo como Platón o Cicerón veían en la república aristocrática al mejor sistema de gobierno para la sociedad.

El demos en Grecia, incluía a los hombres libres que trabajaban con sus manos.

Aristóteles establece de entrada los criterios metodológicos para analizar los diferentes tipos de gobierno: a) “cuál es el más perfecto y qué cualidades debería tener para adaptarse mejor a nuestros deseos si ningún obstáculo exterior lo impide”; b) “qué régimen es apropiado para qué personas” [saber diferencia entre el régimen absolutamente mejor y el que es posible en determinadas circunstancias] y c) “el régimen que parte de un supuesto previo” [establecer su origen y la mejor manera de conservarlo].

Platón consideraba que existía un único modelo ideal de sociedad donde los filósofos o sabios gobernaban, sin recurrir a la voluntad del pueblo, ni imponerse por la fuerza.

Y en consecuencia “…debe tenerse en la mente las variedades de cada régimen y su número, incluso para el establecimiento de las leyes, pues no es posible que las mismas leyes convengan a todas las oligarquías ni a todas las democracias, si realmente hay varias clases y no una sola democracia o una sola oligarquía” (Aristóteles, 1998, p. 218) Es en este punto que Aristóteles hace una primera clasificación de los regímenes políticos, distinguiendo tres regímenes rectos y sus tres desviaciones.

Esta clasificación refleja la confrontación, en el seno de la mente del estagirita, entre los modelos ideales y los casos empíricos.

Pero existen otros criterios que explican como se puede formar una ciudad, basados en la posibilidad de su propia existencia.

Para Aristóteles toda sociedad está dividida en nueve partes: 1) la población encargada de la alimentación, los llamados campesinos, 2) la llamada trabajadora responsable de las artes y los oficios, 3) los comerciantes dedicados a las operaciones de compra y venta, 4) los jornaleros, 5) los defensores (estos últimos garantizan que los ciudadanos no sean convertidos en esclavos por otros Estados).

Dos mil años después nuestro Juan Bosch volvería a ocuparse de la distinción entre democracia y oligarquía.

Se la representa por una matrona sentada majestuosamente en un trono: tiene corona de oro en la cabeza; lleva en una mano el haz de varas, el hacha consular y una corona de laurel, simbolizando la unión, el castigo y la recompensa, y apoya la otra mano en la que tiene un cetro sobre un casco heráldico.

Platón defendió la aristocracia como sistema de gobierno .