[2] En este sentido, el elitismo se aproxima a la idea de la aristocracia (del griego aristokratíā, «el gobierno los mejores»).
Algunas ideas opuestas al elitismo son el igualitarismo, el antiintelectualismo, el populismo o la teoría del pluralismo político.
En la sociedad preindustrial el estatus social dependía en mayor medida de los privilegios estamentales.
El elitismo se basa en una visión monista y maniquea de la sociedad en la que la elite es superior moral, cultural e intelectualmente al «pueblo», que es considerado peligroso, deshonesto y vulgar.
Este tipo de medidas intentarían reducir la distancia entre la élite y aquellos que no lo son.