Este periodo, denominado el Sexenio Revolucionario, duró hasta la instauración de la I República en 1873.
Enterado de este propósito, las tropas gubernamentales bajo el mando del General Crespo formaron una columna de militares y se dirigieron a La Bisbal para impedir que los republicanos pudieran avanzar.
Este día las tropas gubernamentales atacaron la villa, pero los republicanos se defendieron enconadamente, y los obligaron a retroceder.
Entre las voluntarias se encontraban Anna Rocas Abrich e Isabel Vilà i Pujol.
Según Pere Caimó, hubo entre ocho y diez muertos en el campo de batalla y unos ochenta heridos de ambos bandos, pero también se dan cifras más altas.
[6] El diario Nuevo Distrito del día 26 de abril del año 1908, publicaba la siguiente información: Pere Caimó, caudillo de los federales ampurdaneses publicaba el siguiente relato sobre Isabel Vilà i Pujol: Los bisbalenses que murieron luchando o por motivos derivados del conflicto fueron enterrados en el cementerio viejo.
En su parte superior fue depositada una urna donde se guardan los restos de los fallecidos.