Fernando Navarro Ruiz

Alternó su labor de fotógrafo con actividades como la escultura en madera y la ebanistería, regentando la carpintería familiar, así como su propia imprenta.Sin embargo, hay en su obra algo mágico que es capaz de convertir en universal unas imágenes destinadas en principio a no superar los límites de lo local.En el plano fotográfico su obra más famosa es Retrato de grupo con difunta (1900), un retrato familiar presentado con un enorme respeto y donde la difunta presente es un familiar más en la composición planteada por el autor.Obra monumental construida siguiendo técnicas ya utilizadas en la pintura para ensalzar la muerte de personajes famosos (grandes artistas, monarcas, personajes literarios,...) posee una gran hondura trágica, donde parece desvanecerse la diferencia entre muerte y vida en los rostros de los personajes.Su obra ha sido rescatada del olvido en pleno siglo XXI gracias a la labor investigadora realizada por el también fotógrafo Juan Manuel Díaz Burgos para la exposición La imagen rescatada.