Es un mecanismo similar al de otros estimulantes supresores del apetito como el dietilpropión y la fendimetrazina.
Los neurotransmisores señalan la respuesta de alerta (lucha o huida), que también frena el hambre.
Debido al riesgo de insomnio, se recomienda tomar el medicamento antes del desayuno o 1 a 2 horas después.
Generalmente, la fentermina se tolera relativamente, aunque puede producir algunos efectos secundarios debido a que libera catecolaminas.
Entre los efectos más comunes están: taquicardia (pulso incrementado), elevación de la presión sanguínea, palpitaciones, nerviosismo, irritabilidad e insomnio.