El inglés peluquero y fabricante de pelucas George Westmore, en honor de quien se otorga el premio George Westmore Lifetime Achievement Award, fundó el primero (y minúsculo) departamento de maquillaje para películas, en la Selig Polyscope Company en 1917.
Entendía que las necesidades cosméticas y del cabello eran personales y asistía a estrellas como Mary Pickford (a quien alivió de tener que rizar su cabello diariamente para hacer sus famosos bucles, falsos) o las hermanas Talmadge (Norma y Constance) en sus casas antes de salir a trabajar por la mañana.
Fue padre de tres generaciones legendarias de maquilladores cinematográficos, empezando con sus seis hijos— Perc, Ern, Monte, Wally, Bud y Frank— que pronto eclipsaron su fama en Hollywood.
Cuando Valentino murió en 1926, Monte fue a Selznick International donde, trece años más tarde, trabajó hasta la muerte en las enormes demandas de maquillaje para Lo que el viento se llevó (1939).
Las generaciones posteriores han continuado el nombre, incluyendo los hermanos Michael y Marvin que destacaron en efectos de maquillaje especial, como los de Blade Runner (1982), Máscara (1985) y Toro salvaje (1980).