Las instalaciones ferroviarias se encontraban situadas junto a la fábrica que poseía la Compañía Azucarera de Madrid, estando también enlazadas con el ferrocarril industrial que servía a la misma.
[3] A lo largo de su historia numerosos operadores han gestionado el ferrocarril y sus infraestructuras.
En 1964 la empresa Portland Valderribas adquirió el trazado, cuyo tráfico quedó limitado al tramo Vicálvaro-Morata de Tajuña con fines meramente industriales.
A partir de este momento La Poveda se convirtió prácticamente en la única estación intermedia del trazado todavía operativo, donde se cruzaban los diversos trenes mercantes.
Desde su recinto parte también un ramal que llega hasta unas instalaciones anexas.