Escuela de Padua

La importante tradición gótica conservada hasta mediados del siglo XV influye profundamente en el Renacimiento del Norte de Italia, que comienza a manifestarse a través de la actividad de grandes artistas toscanos en Padua, convertida desde entonces en un centro artístico de la mayor importancia.Hacia 1434-37 trabaja allí Filippo Lippi; desde 1443 hasta 1452, Donatello; y también por aquellos años Paolo Ucello; mientras Piero della Francesca lo hacía en la vecina Ferrara en 1449-50.Los diversos elementos renacentistas aportados por ellos operan en Francesco Squarcione (1394/971468), desigual como pintor y carente de personalidad propia -compárese su políptico de Lazara (Museo Cívico, Padua) tan decadente en su goticismo con la donatelliana Madonna del Stadtliches Museum de Berlín-, pero apasionado negociante y coleccionista de cuadros y antigüedades que estimularon decisivamente a sus magníficos discípulos: Cosme Tura, que extiende a Ferrara los elementos renacentistas; Carlo Crivelli, que en 1468 va a las Marcas; y sobre todo Mantegna, que imprime un tono heroico a su figuración realizada plásticamente con trazo incisivo y firme claroscuro, a la vez que muestra un alto ideal de fe en sus cuadros religiosos.La influencia de Mantegna en Venecia, Lombardía y Emilia, durante la segunda mitad del siglo XV, es comparable a la que ejerció Masaccio en Italia central.Otros artistas que se amoldan a las novedades renacentistas con un fondo de peculiaridades locales góticas son: Ansuino da Forli y Niccolo Pizzolo (1421-53), que pintan la capilla del Palacio del Podestá y después intervienen junto a Mantegna en la decoración de la capilla Ovetari con influencias de Filippo Lippi en el color y la cadencia formal y de Donatello en detalles naturalistas; el croata Jorge Chiulinovich el Schiavone (1436-1504), autor de Vírgenes góticas -Madonna de la Galería Sabauda de Turín y políptico de la National Gallery de Londres, que enmarca en arquitecturas renacentistas con motivos decorativos donatellianos; y el boloñés Marco Zoppo (1433-78), autor de Cristo muerto (Museo Cívico, Pesaro) y del políptico del Colegio español de Bolonia, cercano a Cosme Tura.