Esclavitud en el Imperio otomano

[1]​ En 1609 en Constantinopla (actual Estambul), el centro administrativo y político del Imperio, aproximadamente una quinta parte de la población estaba constituida por esclavos.El comercio de esclavos continuaría en gran medida sin cesar hasta principios del siglo XX.A mediados del siglo XIV, Murad I creó un ejército de esclavos, denominado Kapıkulu.Los esclavos capturados eran forzados a convertirse al islam y entrenados para el servicio del sultán.posteriormente, se preferirían los originarios de Albania, Grecia, Bosnia y Bulgaria, por sus destrezas militares.Los esclavos eran comerciados en mercados designados especialmente para ellos, denominados "Esir" o "Yesir" y los mismos se podían encontrar la mayoría de las ciudades.La zona fronteriza al sureste se encontraba en un estado de guerra semipermanente hasta el siglo XVIII.Todavía en 1769, una última incursión tártara importante dio lugar a la captura de 20 000 esclavos rusos y rutenos.Factores como la edad, el color de la piel, la virginidad, etcétera, influyeron significativamente en los precios.Los otomanos probablemente comenzaron a recolectar pençik en la época del sultán Murad I (1362-1389).Los esclavos también podían ser alquilados, heredados, empeñados, intercambiados o dados como regalos.[3]​ Una vez en el imperio Otomano, los Zanj estaban empleados en hogares, en plantaciones y en el ejército como soldados esclavos.Cabe señalar, que no todos los esclavos Zanj eran vendidos en Anatolia, también había importantes mercados en el medio Orienta, India y Asia.Una vez allí muchos se asimilaron gradualmente en las zonas rurales, sobre todo en las islas Unguja y Pemba.Las concubinas del sultán otomano consistían principalmente de esclavas sexuales que habían sido compradas.Los eunucos negros eran esclavos africanos que servían a las concubinas y oficiales en el Harem junto con doncellas de baja graduación.Circasianos, sirios y nubios fueron las tres principales etnias de las mujeres que fueron vendidas como esclavas sexuales en el Imperio otomano.Las jóvenes nubias eran las más baratas y menos populares, costando hasta 20 libras esterlinas.Los jóvenes Dhimmi tomados en el devşirme también podían convertirse en esclavos sexuales, aunque por lo general trabajaban en lugares como baños (hammam) y cafeterías.Se convirtieron en tellaks (masajistas), köçeks (bailarines) o sāqīs (vendedores de vino) durante el tiempo que eran jóvenes y sin barba.Eran reclutados entre las filas de las naciones no musulmanas del imperio, como judíos, romaníes, griegos, albaneses, armenios y otros.Debido a la intervención europea durante el siglo XIX, el Imperio se vio forzado a reducir la trata de esclavos, que había sido considerada legalmente válida bajo la ley islámica aplicada en el imperio desde sus inicios.
Una mameluco de Alepo, Siria.
Un comerciante de Meca (hombre con barba) y su esclavo circasiano. Titulado, "Vornehmner Kaufmann mit seinem cirkassischen Sklaven" [Distinguido comerciante y su esclavo circasiano] por Christiaan Snouck Hurgronje, ca. 1888.
Una fotografía del siglo XIX de un Köçek, un joven esclavo de travesuras usado para fines homosexuales .
Una pintura otomana de niños cristianos de los balcanes tomados como soldados-esclavos.
Mercado musulmán de esclavos en Zanzíbar, origen de los Zanj.
Esclavas en el Harén.
Inspección de esclavas cristianas cirscasianas recién llegadas al Harén, pintada por Giulio Rosati (1858-1917).