Se considera una de las obras más hermosas y originales del arte románico en Burgos.
[2] Es también conocida por la relación que algunos han hecho entre la edificación y la leyenda del Santo Grial.
[3] Las arquivoltas muestran decoraciones comunes en templos románicos salvo una, que contiene rostros y piernas de personas como si estuviesen encerrados en el arco.
[3][1] Sobre la portada se encuentra una ventana ciega con seis arcos que descansan sobre capiteles decorados con motivos vegetales.
[4] El arco toral se asienta también sobre capiteles decorados con grifos y un dragón que devora a un hombre.