Las marcas pueden contar con una sección o filial que gestiona el equipo oficial: ficha a los pilotos y demás integrantes del equipo y se encarga de toda la labor que supone competir.
En el primer caso se encuentran Scuderia Ferrari (Ferrari) o Seat Sport (Seat), mientras que en el segundo caso se encuentran M-Sport (Ford), Prodrive (Subaru) o Ralliart (Mitsubishi).
Ese término se extendió a otras competiciones, como el Campeonato Mundial de Rally.
[1][2] A él se deben los éxitos del Mini y de la profesionalización de los equipos, puesto que fue el primer equipo en desarrollar coches específicos para rally y en asistir a sus pilotos con mecánicos especialistas.
Estos facilitan información a la prensa, mantienen la web, llevan la agenda de los pilotos y sus entrevistas con los medios.