Enrique Enríquez Pimentel, también llamado Enrique Enríquez Pimentel y Guzmán,[1] (Madrid, c. 1600-Madrid, 29 de junio de 1663) fue un noble y hombre de estado español, I conde de Villada y V marqués de Távara[1] Era hijo de Antonio Pimentel y Álvarez de Toledo, IV marqués de Távara[2], caballero de la Orden de Alcántara, gentilhombre de cámara de Felipe III, virrey y capitán general de Valencia, y de Isabel de Moscoso y Sandoval,[1][3] hija de Lope de Moscoso Osorio, V conde de Altamira, y de su esposa Leonor de Sandoval y Rojas.
[3] Casó en primeras nupcias con Francisca de Córdoba y Rojas,[4] hija de Luis Fernández de Córdoba Cardona de Aragón y Recquesens,[5] VIII conde de Cabra, VIII vizconde de Iznájar, VI duque de Sessa, IV duque de Baena, V duque de Soma, VII conde de Palmós, VI conde de Trivento, etc., y de su primera esposa Mariana de Rojas, IV marquesa de Poza.
[6] Sin sucesión de este su segundo matrimonio.
[a] Contrajo un tercer matrimonio con Ana Francisca de Borja Centelles Doria y Colonna, hija de Francisco de Borja Aragón y Centelles Doria, VIII duque de Gandía, IV marqués de Lombay, VIII conde de Oliva y de Artemisia Doria, hija de Andrea II Doria VII príncipe di Melfi.
Le sucedió, de su primer matrimonio, su hija, Ana María Pimentel y Córdoba (m. 16 de marzo de 1686), II condesa de Villada[7] y VI marquesa de Távara,[3] quien fue la tercera esposa de Francisco Fernández de Córdoba Cardona y Recquesens, X conde de Cabra, VIII duque de Sessa, etc.[3][1] Fue creado I conde de Villada por el rey Felipe IV el 26 de mayo de 1625,[8] y, a la muerte de su padre en 1627, heredó el título de marqués de Távara y le sucedió también brevemente como presidente interino del reino de Sicilia.