[4] Su nombre se debe a la ganadería brava que estaba en propiedad de Félix Urcola, que en 1902 creó su ganadería a partir de las compras de reses a José Antonio Daliz.
Apenas tres lustros después se vende en su totalidad a Curro Molina,[7] que le añade sangre de Conde de la Corte en 1926 y tras lo cual fue a parar a José María Galache en 1930.
Durante tres decenios fue santo y seña de los toros Galache hasta que llegaron los Vega-Villar, generando dos encastes que se hermanaron.
Presentan capas muy variadas (negros, colorados y castaños, con destacada presencia del melocotón).
[10][11][12] En el año 2009 tan sólo había 5 ganaderías de encaste Urcola, que sumaban solamente 316 vacas reproductoras y 10 sementales.