Se conocen como elevalunas, elevavidrios, levantavidrios, levantacristales, alzavidrios o alzacristales a los dispositivos técnicos para posibilitar la subida y bajada de ventanillas, especialmente en automóviles.
Las ventanas verticales retráctiles que se podían bloquear en cualquier posición fueron producidas por Lowe, Beva & Co.
[4][5] En 1941, Ford presentó sus primeros elevalunas eléctricos en el Lincoln Custom (solo la limusina y los sedanes de siete pasajeros).
[6] Por su parte, Cadillac disponía una luna divisoria interior recta accionada eléctricamente en su serie 75, aunque no en las ventanillas laterales.
[8] Estos sistemas se basaron en importantes avances hidráulicos realizados en armas militares poco antes de la Segunda Guerra Mundial.
El sistema "Hydro-Electric" (ventanas, ajuste del asiento delantero y techo convertible) se convirtió en un estándar en la gama de 1947.
El sistema completo era estándar solo en los convertibles GM de gama alta fabricados por Oldsmobile, Buick y Cadillac.
De manera similar al sistema electrohidráulico, el aire comprimido simplemente se libera para bajar la ventana y/o el asiento.
A continuación, se admite el aire comprimido en el cilindro respectivo para levantar la ventana o el asiento.
Sin embargo, algunos modelos como Saab, AB Volvo, Mazda y Holden han utilizado interruptores ubicados en la consola central, donde son accesibles para todos los ocupantes.
Las primeras ventanas en la industria del automóvil eran fijas o desmontables, inicialmente solo en la parte frontal y más tarde en los laterales.
Gracias al freno de muelle antirrollo se posibilitó por primera vez que la ventana permaneciera en cualquier posición.
Esta tecnología se comercializó bajo la marca "Atlas" para fabricantes de automóviles como Daimler-Benz, Volkswagen así como Borgward y Lloyd.
El antipinzamiento es un sistema de seguridad que evita daños en objetos o personas si estos son atrapados cuando se cierra la ventana.