Para favorecer el desarrollo de Valdemorillo del Moncayo, un pequeño pueblo de Aragón, su alcalde Benito Requejo Candela (Paco Martínez Soria) pretende convertir el lugar en un gran centro turístico, a la altura de otras ciudades turísticas españolas, para conseguir que la aldea se desarrolle y evitar que los jóvenes tengan que emigrar a otros puntos del país.
Para ello decide marchar a la Costa del Sol con su secretario municipal Basilio (José Luis López Vázquez) para documentarse y ver que es lo que han hecho en esos pueblos para desarrollarse y atraer turismo.
Durante la época en que se rodó la película, el Ministro de Información y Turismo fue Manuel Fraga Iribarne.
En El turismo es un gran invento se muestran las actividades turísticas que solían ofrecer las ciudades costeras españolas basadas en una oferta de sol y playa y los beneficios que este tipo de economía acarreaba al país con la intención de promover el turismo nacional interior.
También puede sumarse una comparación cultural entre los turistas extranjeros y la sociedad española de la época, así como entre la persona rural y la persona de ciudad.