[4] Continuó participando como actor secundario en muchas películas hasta 1944, en que retornó por completo al teatro como actor y empresario.Había fundado su propia compañía en 1940, instalándose en el Teatro Fontalba de Madrid, junto a María Francés y Ricardo Fuentes.
En 1950 adquirió el Teatro Talía de Barcelona, junto a Ignacio Iquino.
Posteriormente en 1960, Iquino (que lo empleaba básicamente para rodar interiores de sus películas) renunciaría a su parte y la vendió a Martínez Soria, que quedó como único dueño del local.
"Don Paco", como a él le gustaba que le llamasen, volvió al cine en los años cincuenta, aunque fue en 1965 cuando, dirigido por Pedro Lazaga, consiguió un gran éxito con la película La ciudad no es para mí, adaptación cinematográfica de un previo éxito teatral del actor que alcanzó las 3000 representaciones.
Durante 5 años la compañía del desaparecido y popular actor continuó representando sus obras alternándose con otras representaciones, pero a finales del año 1987 su teatro cerró sus puertas para siempre.
Los herederos decidieron vender el teatro a una inmobiliaria que no tardó mucho en derribarlo.
En 1988 había desaparecido totalmente y, durante más de 30 años, un solar bruto ocupó esa esquina del núm.