El Buen Pastor, es un óleo sobre lienzo de 123 x 101 cm realizado por el pintor sevillano Bartolomé Esteban Murillo alrededor del año 1660, perteneciente a la escuela española del Barroco.
[4] Hacia el año 1660, Murillo ya era un pintor reconocido, en esta obra introduce efectos de luz brillantes que iluminan los personajes centrales, –en piramidal Jesús y la oveja–, consigue una cara nítida.
[7][8] La composición estuvo preparada por previos dibujos, uno de ellos el Buen Pastor se encuentra también en el Museo del Prado.
[11] El tema empleado por Murillo debe su inspiración al texto del Evangelio de Juan (10, 11-14) en el que Jesucristo se presenta como el Buen Pastor que conoce a sus ovejas por sus nombres y da su vida por ellas: «Yo soy el Buen Pastor.
Madrazo opinaba que la oveja que se encuentra en primer término en la que Jesús apoya su mano izquierda, haría referencia a la parábola de la oveja perdida del Evangelio de Mateo (18, 12): «Si uno tiene cien ovejas y se le extravía una, ¿no dejará en el monte las noventa y nueve restantes e irá en busca de la extraviada?».