[1] Eitel Federico reorganizó la administración del condado, que sus predecesores habían descuidado.
[2] Inició otros proyectos edificatorios también, como la iglesia abacial de Santa Lucerna y la torre Baja.
Murió en 1605 y fue enterrado en la iglesia del monasterio de San Luzen.
En 1609 se añadió una placa de bronce a su tumba, cubriendo su corazón.
Lleva una inscripción bíblica en latín «Ubi thesaurus meus, ibi cor meum», [donde permanece mi tesoro, permanece mi corazón] (Lucas, 12).