Judicael fue proclamado rey, pero se retiró pronto a un monasterio y fue sustituido por su hermanastro Haëloc, hombre muy sanguinario.
Este se enfrentó a su padre en Saint-Malo, pero fue vencido y Clotario, como represalia, ocupó todo el condado de Vannes.
570), sucesor de Chanau, había sido obispo; Cunomor el maldito (fl.
780) y Morvan (muerto en 795), En 786 Carlomagno estableció una Marca en los límites de Armórica (en la actual Alta Bretaña, zona galófona), con la cual consiguieron autonomía dentro del reino franco, pero ya en 799 se sublevarían para independizarse de los francos y fundarían el efímero Reino de Bretaña.
Los carolingios sometieron a los bretones en el siglo VIII, pero las diversas expediciones organizadas durante los reinados de Carlomagno y Ludovico Pío muestran que los bretones permanecieron insumisos.
En 831, Ludovico Pio cambió de estrategia: pactó con Nominoe, un noble bretón del condado de Vannes, y le nombró missus dominicus para los territorios bretones.
Sus sucesores hasta la invasión normanda se nombran reyes de Bretaña.
Alano II, nieto del último rey de Bretaña, Alano I, libera al país del yugo normando y se convierte en el primer duque de Bretaña.
En 1491, cuando Ana de Bretaña, que había heredado el ducado, se casó con Carlos VIII de Francia, Bretaña se unió temporalmente a Francia.
La unión fue ratificada mediante un tratado en 1532, durante el reinado del soberano francés Francisco I, que se había casado con Claudia, la hija de Ana de Bretaña.
Al mismo tiempo, los Estados Generales fueron sitiados por los franceses en Gwened, e incluso desviaron el curso del río Nançon con tal de apresarlos.
En los Estados se enfrentarían Pierre de Argentre, jefe del partido bretón ("nacionalista"), y los Désert, dirigentes del partido profrancés, y que a la larga se impondrían.
No obstante, el registro de la secretaría de los Estados Generales sería debida a París, aunque mantuvieron la independencia en el derecho fiscal, leyes, milicias y constitución.
El duque, que era el rey de Francia, sería ayudado por un Procurador General (más tarde gouverneur), que haría las funciones del mismo, y por un Conseil.
Ello significaría la derrota definitiva del partido bretón, que hasta entonces había dominado el Parlamento.
Algunos marineros bretones destacarían en la historia francesa de aquellos años: Jacques Cartier (1491-1557) exploraría por primera vez las costas de Canadá; René Duguay-Trouin (1673-1736) lucharía contra los piratas argelinos y los ingleses en Brasil, y fue corsario durante la Guerra de Sucesión; y Robert Surcouf (1773-1827), que lucharía con Napoleón I contra los ingleses.