Ante este hecho se comienza a pensar en un vasto sistema de riego para fomentar la productividad del suelo.
En 1908, contratado nuevamente, se embarcó para concretar las obras en la Argentina pero la muerte lo sorprendió en pleno viaje.
Las mejoras en el riego se expresaron en la creciente calidad de los cultivos, que comenzaron a diversificarse.
La empresa británica Ferrocarril del Sud llegaba desde Bahía Blanca hasta lo que hoy conocemos como la ciudad de Cipolletti.
En 1910 la empresa trabajaba en los canales de irrigación en la colonia “La Picasa”, actual Cinco Saltos, y comenzó a construir el tramo de vía que va desde Cipolletti a Barda del Medio, para transportar los materiales para la construcción del dique Neuquén (luego llamado dique ingeniero Rodolfo Ballester, en honor a quien culminó la obra), obra que fue financiada por el gobierno nacional y realizada por la compañía Tierras del Sud.
Por este motivo, esta compañía realizó una fuerte inversión orientada al negocio inmobiliario.
También facilitó trabajar de noche, ya que tenía una capacidad lumínica de 1 km Se crea un convenio entre Agua y Energía de la Nación y Correo y Telégrafo para dar aviso desde Chos Malal, sobre las crecidas que se formaban en la naciente, a Barda del Medio a través un telégrafo con clave morse.
Por otro lado, la introducción de especies exóticas (cultivadas, en muchos casos) ha aumentado la biodiversidad del área.
Los cambios en la vegetación y en las condiciones hidrológicas (por ejemplo, embalsamiento aguas arriba del dique) han tenido su impacto en la composición faunística.
• Autóctonos: zorzales patagónicos, palomas picazuró y manchada, torcazas, torcasita, carpinteros, verderones, calandrias, cisnes de cuello negro, garzas, gallaretas, patos overos, patos maiceros, patos barcinos, biguáes y flamencos (aves), pejerreyes patagónicos, varias especies de percas (peces), nutrias o coipos y hurones (mamíferos).
• Exóticos: gorriones, palomas domésticas (aves), truchas arco iris, Corydoras paleatus, mojarras, carpas (peces).