NOTA: La especies Diphysa punctata es endémica a México, no existe en América del Sur.
Puede desarrollarse en general en todo tipo de suelos, siempre que estos tengan buen drenaje.
La sarrapia real, leguminosa de las Papilionidae, se propaga mediante semillas, las cuales pueden sembrarse en un semillero o en su lugar definitivo.
En su etapa juvenil requiere sombra moderada o parcial hasta que logre alcanzar alturas de 1 a 2 m. En algunos países, cuando hacen plantaciones artificiales, suelen sembrar maíz o cambur entre los retoños para que les proporcionen sombra.
[3] En la época de su mayor auge, que va desde 1890 hasta 1950, su comercialización fue monopolizada y el dictador venezolano Juan Vicente Gómez mostró interés en su explotación.
[1] El uso de las semillas, como talismán fue común entre los indígenas del Amazonas, quienes confeccionaban collares y brazaletes con ellas.
Actualmente los principales países productores de sarrapia son Brasil, Venezuela, Trinidad y Tobago.
[1] Se le atribuyen algunas propiedades medicinales sin embargo no existe evidencia médica que respalde estas creencias.
Las semillas supuestamente actúan manteniendo el flujo natural del torrente sanguíneo, evitando así coágulos y trombosis.
[3][5] Diphysa punctata fue descrita por Per Axel Rydberg y publicado en North American Flora 24(4): 211.