La diócesis tiene 930 km² y extiende su jurisdicción sobre los fieles católicos de rito latino residentes en 33 comunas de la ciudad metropolitana de Regio de Calabria en la región de Calabria: Anoia, Candidoni, Cinquefrondi, Cittanova, Cosoleto, Delianuova, Feroleto della Chiesa, Galatro, Giffone, Gioia Tauro, Laureana di Borrello, Maropati, Melicuccà, Melicucco, Molochio, Oppido Mamertina, Palmi, Polistena, Rizziconi, Rosarno, Santa Cristina d'Aspromonte, San Ferdinando, San Giorgio Morgeto, Scido, San Pietro di Caridà, Seminara, San Procopio, Sant'Eufemia d'Aspromonte, Sinopoli, Serrata, Taurianova, Terranova Sappo Minulio y Varapodio.
En 2021 en la diócesis existían 66 parroquias agrupadas en 4 vicarías: Gioia Tauro-Rosarno, Oppido Mamertina-Taurianova, Palmi y Polistena.
[11] Después del Concilio de Trento los obispos estuvieron más presentes en la diócesis.
El obispo Giovanni Battista Montani (1632-1662) restauró la catedral y el palacio episcopal; Bisanzio Fili fue responsable de la fundación del seminario episcopal en 1701, que recibió un eficaz enfoque metódico, escolástico y disciplinario gracias a la obra del obispo Giuseppe Maria Perrimezzi (1714-1734).
El mismo año también murió el obispo Nicolò Spedalieri y la diócesis permaneció vacante durante aproximadamente una década.
Nicola Canino (1936-1951) fue responsable de la construcción del actual palacio episcopal, donde, en algunas salas, se encuentra desde 2003 el museo diocesano fundado por el obispo Luciano Bux.
[14] Esto inspiró al obispo Francesco Milito a encargar tres grandes cuadros colocados en el ábside de la catedral, donde en el centro se encuentra Cristo Pantocrátor y, en particular, a su derecha la Virgen Madre que, con un pergamino en la mano, pide la bendición a su Hijo de la iglesia de Haghia Hagaté, es decir, Oppido en la eparquía Salina.