Desempleo tecnológico

De modo que las empresas que pueden permitírselo, para mantener su competitividad en el mercado global, adquieren sistemas automatizados para competir con los trabajadores humanos de otras empresas o tener ventaja frente a una maquinaria automatizada menos eficiente.

Y si se crea, mayoritariamente es empleo precario, a tiempo parcial o poco remunerado.

Prueba de esto son Japón, Corea del Sur y Singapur, los países con más robots por habitante, que tienen tasas de desempleo entre las más bajas del mundo.

Durante los próximos 20 años se espera que la mitad de los trabajos sean realizados por ordenadores y robots, tal como informa la universidad de Oxford,[1]​ en un comienzo se reemplazarán trabajos más mecanizados como transporte, producción, administración, logística, venta, servicios y hasta la construcción.

La Casa Blanca, en un informe al Congreso, ha puesto la probabilidad en un 83 por ciento de que un trabajador que gana menos de U$S 20 por hora en el 2010 eventualmente perderá su trabajo frente a una máquina.

Un asistente automático en línea dando servicio de atención al cliente en un sitio web – una de las muchas aplicaciones primitivas de la inteligencia artificial.