El orden dórico (en griego: Δωρικός ρυθμός; en latín: Ordo Doricus) es el más antiguo y simple de los órdenes arquitectónicos clásicos.
Cuanto más antiguo, más sencillo, dando sensación de robustez (protodórico), cuanto más tardío, más esbelto y proporcionado es; logrando así la armonía y belleza clásica.
Se empleó en la Grecia continental desde finales del siglo VII a. C. así como en el sur de Italia y Sicilia.
[2] El Partenón, templo dedicado a Atenea Parthenos en la Acrópolis de Atenas, es sin duda el máximo exponente de este estilo arquitectónico.
Las características que definen este orden arquitectónico son: