[1][nota 1] El Cycloped fue el único vehículo inscrito en el concurso que no dependía de la potencia del vapor, sino que utilizaba una cinta de tracción, que un caballo de tiro montado en su parte superior mantenía continuamente en movimiento.
Brandreth era uno de los directores del Ferrocarril de Liverpool y Mánchester (compañía que había organizado las pruebas), y algunas personas pensaban que esta circunstancia le daba a la Cycloped una ventaja injusta.
Los primeros ejemplos, con solo uno o dos vagones juntos, eran arrastrados cuesta abajo por el caballo, que también actuaba como freno.
Los caballos eran llevados cuesta abajo en un coche especial, denominado dandy wagon, generalmente enganchado al final del conjunto de vagones cargados.
Estos vagones eran simples carros sin motor, a menudo sin más adaptación para los caballos que puertas especiales para cargar y descargar los animales.