Se dispone que el cuerpo se recompondría mientras las necesidades del servicio no exigiesen su aumento, con una plantilla de ocho primeros capellanes, dieciséis segundos y veinticuatro terceros.
Muchos capellanes se fueron presentando a las autoridades navales de la llamada Zona Nacional.
Al no ser estos suficientes en número, se contrató a sacerdotes diocesanos como capellanes provisionales, la mayoría de los cuales pasaron después a formar parte del cuerpo Eclesiástico.
Los capellanes castrenses se integraron entonces en el nuevo Servicio de Asistencia Religiosa en las Fuerzas Armadas (SARFA), ejerciendo ahora sus funciones conforme a una relación denominada “de servicios profesionales”.
Las divisas irán colocadas sobre fondo morado, llamado romano o eminencia.
Bastón: El personal del Cuerpo Eclesiástico tiene como peculiaridad el uso de un bastón de caña de indias, a diferencia del resto de cuerpos de la Armada, que utilizan el sable: Los Tenientes Vicarios, con puño dorado, cordón y borlas negras; los Capellanes Mayores, con puño dorado sin colgante, y los Capellanes primeros y segundos, puño plateado sin colgante.