Desde el siglo XVIII, los diferentes Cuerpos en que se ha organizado la Armada Española, han recibido la denominación de Cuerpos Patentados.
Se denominaba así a los Cuerpos de la Armada que no contaban entre sus individuos ninguno de la clase subalterna (Cuerpos Subalternos) y que, desde la categoría de capitán o asimilado en adelante, recibían Real Patente en cada uno de sus empleos (el rey firmaba los nombramientos).
Los Cuerpos Subalternos eran aquellos cuyos individuos, aunque alcanzaran carácter de oficiales por las graduaciones o consideraciones personales a que tenían derecho, no eran oficiales vivos y efectivos.
A partir de 1931, estos Cuerpos dejaron de llamarse Subalternos y pasaron a llamarse Cuerpos Auxiliares.
Después de la guerra civil, los Cuerpos que componían la Armada fueron: