Los cristadelfianos (del griego Christou Adelphoi: Hermanos en Cristo)[1] constituyen una confesión cristiana no trinitaria.
[10] Otras muchas comunidades pequeñas existen diseminadas en Europa, Asia y en América Latina, donde el grupo más numeroso se encuentra en Centroamérica.
En su doctrina, Dios Padre y Jesucristo no son un solo ser, sino dos diferentes, mientras que el Espíritu Santo no es una persona, sino el poder de Dios utilizado en la creación y para dirigir a las personas a la salvación.
Los Cristadelfianos rechazan cierto número de doctrinas tradicionalmente aceptadas por otros grupos cristianos, entre ellas: Los Cristadelfianos sostienen que el Cristianismo perdió su sentido original a partir del siglo II, por lo que la única forma de obtener la salvación es conociendo el evangelio original predicado por la Iglesia del primer siglo y viviendo una conducta basada en ese conocimiento, su esfuerzo se basa en retornar a las raíces del evangelio pues creen que el cristianismo se ha deformado históricamente: primeramente el cambio de visión antropológica y etnocentrismo causado por la filosofía griega aplicada por los llamados Padres de la Iglesia a una doctrina en esencia judía, y en segundo lugar la adopción del Cristianismo como religión de Estado por la Roma imperial sincretizando la estructura organizativa y liturgia de la religión y paganismo romano.
Esto hizo que el movimiento de Campbell lo expulsara durante su viaje al Reino Unido.
[nota 1][nota 2][21] En efecto, al estallar el conflicto en los Estados Unidos en 1861, el doctor Thomas fue llamado a Freeport, Illinois, donde los hermanos estaban muy deprimidos por el inminente reclutamiento de soldados, ya que sus creencias y convicciones religiosas se oponìan a la participación en la guerra, pero dado que no tenían un nombre que los identificara como confesión religiosa, no podían ser eximidos de la misma como otros grupos pacifistas como los cuáqueros.
En ese contexto surgió el nombre "cristadelfiano" (las palabras se usan en la epístola a los Colosenses 1:1-2) y tanto la Confederación como la Unión les concedieron la exención del servicio militar por ser “objetores de conciencia”.
Aunque el nombre 'cristadelfiano' sólo ha estado en uso desde entonces, los cristadelfianos sostienen que todo verdadero creyente del Evangelio, en cada generación, es considerado un hermano o hermana en Cristo aunque hayan vivido antes de que se usara por primera vez este nombre, tanto los discípulos de Cristo en el primer siglo como los creyentes posteriores y los anteriores que siguieron "la fe de Abraham" son cristadelfianos.
La posición cristadelfiana sobre la objeción de conciencia pasó a primer plano con la introducción del servicio militar obligatorio durante la Primera Guerra Mundial.
En el Reino Unido, Canadá, Australia, Nueva Zelanda y los Estados Unidos se otorgaron diversos grados de exención del servicio militar a los cristadelfianos, durante la Segunda Guerra Mundial, se les requirió que realizaran trabajos civiles bajo la dirección de las autoridades.
Poseen comités en varias partes del mundo, cuyo fin es centralizar la ayuda y expandir sus creencias, sin embargo carecen de una sede central.