Tradicionalmente se había considerado como hijo bastardo del rey Felipe IV, aunque recientes investigaciones han descartado la supuesta filiación real y han sacado a la luz su ascendencia.
Realizó una intensa labor pastoral efectuando dos visitas de la diócesis e incluso reunió un sínodo en 1672.
También fundó un hospital en Huanta dotado por sus bienes particulares.
Fue finalmente promovido a Arzobispo de La Plata, Charcas (hoy Bolivia).
Resistiéronse unos años los jesuitas a la innovación, pero finalmente el Presidente de la Audiencia de Charcas se impuso y como titular del Vicepatronato Real llevó adelante la iniciativa.
Falleció en 1683 en su sede episcopal, la ciudad de La Plata.