La abadía fue edificada en el siglo IV, a orillas del Louts, afluente del Adur, en el lugar del martirio de San Girons, evangelizador de la provincia romana de Novempopulania.
Su creación se remontaría a la época de Carlomagno, pero no hay indicios de una comunidad religiosa hasta el siglo XII cuando se registra en las donaciones hechas al capítulo de Lescar.[cita requerida].
La iglesia, dañada durante la Guerra de los Cien Años y durante las guerras de religión, fue totalmente destruida en 1904, salvándose únicamente la cripta.
La bóveda, restaurada, está soportada por columnas coronadas por capiteles tallados con motivos bíblicos, mitológicos o vegetales y cimacios ornamentados.
Las escenas religiosas estaban destinadas a los fieles y peregrinos que se dirigían a Santiago de Compostela ya que la parroquia jugaba, en la Edad Media, un importante papel como etapa de la vía Lemovicensis.