Congregación para las indulgencias y reliquias sagradas

La Congregación para las indulgencias y las sagradas reliquias (en latín: Congregatio indulgentiarum et sacrarum reliquiarum) fue un organismo de la Curia Romana, creado en 1669 y suprimido en 1904.

La Congregación también gestionaba la autentificación de las reliquias, sobre todo cuando los litigios se abordaban en procesos judiciales.

La Congregación contaba con su propio personal de teólogos y arqueólogos, en su mayoría jesuitas o capuchinos, para ayudar a resolver cuestiones complejas.

A principios del siglo XVIII, la Congregación comenzó a distribuir indulgencias por sí misma, un privilegio que fue reconocido por el Papa Benedicto XIV en 1742.

Finalmente, el 25 de marzo de 1917, el Papa Benedicto XV, con el motu proprio Alloquentes proxime, asignó esas responsabilidades a la Penitenciaría Apostólica.