Condado de Carrión
[6][17] El condado le fue concedido a Juan Sánchez Manuel, como señaló Salvador de Moxó, por su apoyo a Enrique de Trastámara durante la Guerra Civil y por ser miembro, debido a su pertenencia al linaje de los Manuel, de la «más alta nobleza» castellana.[18] El mismo historiador también afirmó que fue uno de los primeros condados otorgados por el rey Enrique II, y que estos «en principio» sólo se concedían a personas de sangre real,[19] y además puede ser incluido en las célebres mercedes enriqueñas, como aseguró Echevarría Arsuaga.Tras la muerte del conde Juan Sánchez Manuel, la villa de Carrión no pasó a manos de su hijo Sancho Manuel, sino de su hija Leonor Manuel,[20] que estaba casada con Juan de Padilla, y para disfrutar de su posesión alegaba el privilegio por el que Enrique II había concedido el condado de Carrión a su padre y que había sido confirmado también por su hijo y heredero, el rey Juan I de Castilla.[21]Pero la reina Catalina de Lancáster, que era la esposa de Enrique III de Castilla, también reclamaba a finales del siglo XIV la posesión de la villa de Carrión argumentando, entre otros puntos, que Enrique II había establecido en su testamento que todas las concesiones que él había hecho de bienes o títulos durante su reinado podrían ser reclamadas por sus antiguos poseedores.[22] En la fecha y lugar mencionados anteriormente la reina Catalina y Leonor Manuel acordaron que esta última, tras haber obtenido de Enrique III la licencia para poder hacerlo, vendería la villa a la reina Catalina por 15 000 florines de oro aragoneses, y ese mismo día Leonor Manuel y su esposo juraron respetar todo lo establecido en la escritura de venta.