Condado de Rasez

[1]​ La situación permaneció estable en Rhedae y Septimania hasta que el año 756 los francos la conquistaron.

Guillemó quizás aguantó un par de años en Rasez y en el Conflent, o quizás marchó a continuación, pero parece seguro que se fue a Córdoba y allí debía de morir.

Todos sus "honores" (es decir posesiones territoriales, condados en general, que cuando incluían de dominios fronterizos daban derecho a su titular a ser llamado marqués) pasaron al duque Berenguer, conde de Tolosa, consejero de Pipino, pero que había permanecido leal al emperador Ludovico Pío.

El emperador volvió a nombrar a Bernardo de Septimania, que mientras tanto se había distinguido en las luchas civiles, en las que resultó muerto Gaucelmo, su fiel Sanila y la hermana de Gaucelmo y Berenguer, Gerberga, una monja.

Berenguer, pues, tuvo que volver a administrar Rasez y el Conflent.

Seguramente, siguiendo la tradición, encomendó la administración de los dos condados a su hijo Guillermo, pero este también estuvo casi siempre ausente, hasta su derrota y ejecución en 850, a causa de las luchas civiles del imperio.

Su hijo y sucesor fue Bera II, que es mencionado ya como conde en una carta datada en febrero de 846.

Seguramente, Miró Eutilio no cambió a tiempo de bando y perdió el condado, puesto que aparece solo como juez.

Este gobernó el condado hasta su muerte el 1011 y lo sucedió su hijo Arnau II, casado con Llucia de Provenza, que murió el 1037.

Su sucesor fue su hijo Ramon I, casado con Beliarda de Montpellier, muerto el 1059, dejando un único hijo y heredero, Ramon II, que fue conde de Rasez hasta su muerte, el 1066.

Condado de Rasez y condados vecinos, hacia el 790-850
Rasez y Carcasona, siglos IX y X